Como resultado de las operativos realizados en la ciudad, fueron secuestrados dos motovehículos: uno por carecer de la documentación correspondiente y otro por la utilización de un caño de escape no permitido, que generaba ruidos molestos y afectaba la convivencia ciudadana.

El procedimiento se llevó adelante este jueves en el marco de la Ordenanza Municipal N° 75/24, que faculta al municipio a retener vehículos en infracción a las normativas de tránsito. Los casos fueron derivados al Juzgado de Faltas para su resolución.

Desde la Dirección de Movilidad destacaron la importancia de estas acciones, cuyo objetivo es reforzar la seguridad vial y garantizar el cumplimiento de las normas para una mejor convivencia en el espacio público.

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